Cuidar la propia familia es urgente
Soy profesor con bastante experiencia docente. Desde hace más de veinte años tengo conversaciones semanales con alumnos, sobre todo entre 16 y 18 años, en las que hablamos de muchas cosas. Por este motivo quisiera opinar sobre la juventud actual y sus familias. Pienso que los jóvenes son muy agradecidos-aunque no lo parezca- a las muestras de ayuda y cariño sinceros. Tienen una alta estima de la amistad y lo que realmente les motiva es el ejemplo de vida. Se encuentran con serios problemas: Situaciones familiares desestabilizadas, en ocasiones. Unos medios audiovisuales consumistas muy atractivos, a veces inmorales. Un sistema de enseñanza “hechizada” por la incompetencia. Todo esto provoca en un buen número de ellos desmotivación por el trabajo, miedo al compromiso, así como una promiscuidad sexual, potenciada por la actual ideología educativa, sin precedentes –en ocasiones se dan prácticas de felonía sexual en chicas de 13 años, según testimonio de uno de mis alumnos, de los que me fío-. Ante todo esto hay un modo positivo de actuar: los padres tienen que ingeniárselas para dedicar tiempo a sus hijos; muchas veces basta con “estar”. Si no se cuida con actos concretos, incluso heroicos, la familia se viene abajo. Uno de ellos de especial importancia para las familias cristianas es tener algunas practicas de oración común. La sabiduría popular afirma que “la familia que reza unida permanece unida”. Estamos totalmente a tiempo de darle la vuelta a la situación.
José Ignacio Moreno Iturralde
José Ignacio Moreno Iturralde
0 Comentarios:
Publicar un comentario
<< Home